Este año, desde la última semana de marzo, empezaron a escucharse los trinos de los cenzontles en el campus de la Universidad Francisco Marroquín.
Los cenzontles también se conocen como yigüirros, Turdus grayi o pájaros de las 400 voces, por su capacidad de imitar los cantos de otros.
Los adultos de esta especie pueden llegar a medir entre 23 y 25.5 centímetros. Su parte superior es de color café y la inferior opaca o de color ocre. El cuello es más pálido y está marcado con finas rayas de color café. Su pico es de color verde opaco y sus patas de color oscuro.
Suelen ser vistos cerca del nivel del suelo, o sobre el mismo, donde corren muy rápidamente con la cola abierta y erguida. Los adultos perchan en la parte superior de los arbustos y en los cables del tendido eléctrico, o telefónico a los lados del camino.
Sus nidos tienen forma de copa abultada y se componen de grama, pequeñas ramas y fibras vegetales. Las hembras ponen de tres a cinco huevos por nidada, y son de color azul pálido o azul verdoso. Suelen estar pintados de pequeñas manchas cafés y grises. El yigüirro es el ave nacional de Costa Rica.
Cuando empieza la temporada de lluvia, suele decirse que los cenzontles cantan para llamar a la lluvia. Sin embargo, la verdadera razón por la que cantan es porque están en temporada de apareamiento.
El campus de la UFM no se limita a sus instalaciones académicas. También es una reserva natural, en la que se conservan y exhiben plantas y árboles vivos, tanto nativos como exóticos. El conjunto es un verdadero refugio ecológico para las especies animales y vegetales del área que se encuentren en peligro; mantiene el ecosistema del campus y cuenta con un inventario de la biodiversidad que habita en esta casa de estudios que puedes consultar en arboretum.ufm.edu.
Contacto:
Arboretum
arboretum@ufm.edu
Guatemala, 20 de abril del 2023
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