En esta temporada el campus de La casa de la libertad, se llena de ardillas, pequeños visitantes que se ven atraídos por las bellotas que florecen en los encinos y que utilizan para alimentarse.
Las ardillas de los árboles se pueden encontrar en bosques y también en parques de las ciudades. A pesar de ser expertas escaladoras, suelen bajar al suelo para buscar alimento como frutos secos, bellotas, bayas y flores. También comen corteza, huevos o pájaros pequeños. La savia de los árboles es un manjar delicioso para algunas especies.
La especie de ardilla registrada en el Arboretum de la Universidad Francisco Marroquín es la Sciurus aureogaster. Los individuos adultos de esta especie son roedores esciuromorfos, pertenecientes a la familia Sciuridae.
Estos mamíferos son considerados como ardillas de tamaño medio-grande, ya que el cuerpo mide entre 42 y 55 centímetros y poseen una cola de 20 a 30 centímetros de longitud. La ardilla gris guatemalteca está cubierta por un pelaje de color gris y blanco, el abdomen está cubierto con pelo de color y tono rojizo.
Existen también individuos de color negro. Las orejas y los ojos son pequeños; los dientes son fuertes y los usan para abrir nueces. Se conocen dos subespecies de Sciurus aureogaster: Sciurus aureogaster aureogaster y Sciurus aureogaster nigrescens.
Las ardillas tienen distribución cosmopolita, por lo que se les puede encontrar en todo el mundo y existen aproximadamente 230 especies. Su hábito es diurno, por lo que están activas durante la mañana, tiempo en el que forrajean (buscan alimento).
Existen cuatro especies de encinos en el Arboretum: Quercus peduncularis, Quercus sapotaefolia, Quercus tristis y Quercus skinneri. Los encinos florean en marzo y abril y luego sus flores se convierten en bellotas que son codiciadas por los pájaros carpinteros y por las ardillas.
Los encinos se distribuyen desde el sur de México hasta Honduras. En Guatemala se les encuentran en bosques mixtos de 1,000 a 3,000 metros sobre el nivel del mar. Pueden formar rodales puros de extensiones considerables.
La mayoría de los encinos se utilizan para obtener leña y carbón. Constituyen una de las principales fuentes de energía doméstica en Guatemala porque su madera es compacta y se transforma en brasa durable. También se aprovechan en mueblería y en carpintería artesanal.
Las hojas suelen estar plagadas de bolas de crecimiento deforme, conocidas como agallas, donde anidan los insectos. Las bellotas también constituyen un buen alimento para los cerdos y otro tipo de ganado.
El campus de la UFM no se limita a sus instalaciones académicas. También es una reserva natural, el Arboretum, que conserva y exhibe plantas y árboles vivos, tanto nativos como exóticos. El Arboretum conforma un refugio ecológico para las especies animales y vegetales del área que se encuentren en peligro, mantiene el ecosistema del campus y cuenta con un inventario de la biodiversidad que habita en esta casa de estudios.
Videos del Arboretum en New Media:
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Contacto:
Carmen María Mejía
Arboretum
arboretum@ufm.edu
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