El nombre de Popol Vuh se lo dio a ese libro Charles Brasseur de Bourbourg, y suele llamársele el Libro del consejo de los indios quichés, ya que la palabra pop quiere decir petate. Quienes se sentaban en el petate eran los sabios, dijo Rossanna Valls, gerente de el museo Popol Vuh de la Universidad Francisco Marroquín, durante su participación en el programa digital Regla de tres, en la emisión dedicada al Popol Vuh.
En el programa también participó Irina Rohrmoser, autora de una edición del Popol Vuh para niños. Regla de tres es dirigido por Grecia Barrera, Héctor Chinchilla y Ana Ruth Monroy.
En el programa, Valls explicó cómo ayuda el museo Popol Vuh a los visitantes a entender la historia de Guatemala. Añadió que el libro se basa en historias orales, transmitidas de generación en generación, recogidas seguramente en algún códice de papel de amate, que ya no tenemos; luego, en el siglo XVI, una persona de habla quiché, que escribía en alfabeto latino, escribió el libro original que Francisco Ximénez copió en quiché y tradujo al español. Esa es la versión más antigua que existe y está en Newberry Library, de Chicago. Sin embargo, los guatemaltecos pueden visitar y conocer un facsímil en el museo Popol Vuh. Durante el programa, la gerente del museo contó la vida azarosa del libro.
Valls explicó que el Popol Vuh tiene tres partes: la creación, la mitológica y la histórica, —de modo que hay una combinación de ficción y realidad en él— y reiteró la importancia de que los niños lo conozcan.
Tanto Irina Rohrmoser como Rossanna Valls se refirieron a las partes del libro que cada una de ellas consideró sus favoritas: para Rohrmoser es la creación del sol y de la luna, a partir de Hunahpú e Ixbalanqué; para Valls es la creación de los seres humanos: los hombres de maíz.
Contacto:
Museo Popol Vuh
popolvuh@ufm.edu
Guatemala, 17 de junio del 2022
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