Las jacarandas alegran el campus de la Universidad Francisco Marroquín y la ciudad de Guatemala con su inconfundible explosión de color. Entre febrero y abril, estos árboles despliegan sus flores moradas en grandes panículas, creando un paisaje vibrante. Sus frutos, similares a castañuelas de color marrón, resguardan semillas aladas listas para esparcirse con el viento.
Jacarandas en el campus de la UFM. Foto por Luis Figueroa.
Originaria de Sudamérica, la jacaranda se ha naturalizado en Guatemala y se ha convertido en una de las especies más apreciadas del paisaje urbano. Ya sea en jardines privados o en espacios públicos, su floración es un espectáculo en estos meses del año. Cuando sus pétalos caen, transforman el suelo en una alfombra violeta que encanta a todos.
Más allá de su belleza ornamental, en algunas regiones la infusión de sus flores se emplea como tratamiento contra las amebas, y su madera es valorada en trabajos de laminado en Sudamérica.
Jacaranda. Ilustración botánica por Susi Sierra. Foto de Arbretum/UFM.
En el arboretum de la UFM, la jacaranda forma parte del esfuerzo por conservar y exhibir especies nativas y exóticas. De esta manera, la universidad no solo embellece su entorno, sino que también refuerza su compromiso con la naturaleza y el conocimiento botánico.
Contacto:
Arboretum
arboretum@ufm.edu
Guatemala, 5 de marzo del 2025
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